Seis años han pasado desde el caso que terminó con la condena a seis personas como responsables de la muerte de Eduardo Lara, trabajador del municipio de Valparaíso que falleció en un incendio en un inmueble municipal en medio de las manifestaciones que ocurrían en el plan de la ciudad por la Cuenta Pública Presidencial del año 2016.

Hasta la fecha sólo uno de ellos ha sido capturado, Felipe Ríos, y la familia teme que si no se da con el paradero del resto de los prófugos, los culpables puedan apelar a una prescripción.

Así lo denunció Luis Lara, hijo del trabajador fallecido quien indicó que ahora que se encuentran prófugos los culpables y queda fuera de sus manos dar con su paradero. Apuntó a la falta de cooperación de las policías para encontrarlos.

El fiscal jefe de Valparaíso, Cristian Andrade, señaló cómo se resolvió esta materia en el proceso judicial, dando cuenta que habían solicitado asegurar las capturas.

Una de las principales preocupaciones de la familia es que, en caso de que no se capture a los prófugos restantes en el corto plazo, es posible que puedan apelar posteriormente a una media prescripción, ya que se acerca la fecha en que algunos de los condenados cumplirán la mitad del plazo que se exige en su condena.

Esto podría derivar en que, si son capturados después de ese plazo, la apelación en tribunales podría significar la atenuación o reducción de la pena original, sin importar el tipo de delito por el que hayan sido sancionados.