Duras han sido las críticas al alcalde Jorge Sharp por parte de las autoridades regionales ante la situación que afecta a Laguna Verde estos días, luego de que se interrumpiera su servicio de agua potable mediante la reventa, a precios tan elevados que los llevó a movilizarse a las afueras del Gobierno Regional.

En esta línea, el gobernador Rodrigo Mundaca criticó al jefe comunal y manifestó su molestia, ya que no tiene las competencias para ofrecer una solución al problema inmediato, pero afirmó que decidieron involucrarse de todas maneras por su militancia en Modatima.

Asimismo, indicó que han conversado constantemente con Esval para otorgar a Laguna Verde la cantidad de agua que necesitan sus habitantes, pero aseguró que es necesario reconocer que el problema es estructural, por lo que la municipalidad tiene la principal responsabilidad.

En esta línea, reprochó la solicitud mediante oficio y señaló que el conducto regular es otro, involucrando a diversos órganos del aparato del gobierno regional. Sostuvo que “no es posible endilgarle a otras instituciones la responsabilidad por sus propias irresponsabilidades”, reconociendo que hay inequidad hídrica, pero que las autoridades deben hacerse cargo del problema.

Finalizó esta crítica con la molestia por acceder primero a la manifestación en vez de al diálogo entre ambas autoridades, “alentando que griten improperios contra nosotros”, con la asistencia del delegado municipal de esta macrozona de la ciudad. Afirma que amerita una explicación “que sea convincente” y “para reparar la honra agraviada de funcionarios del Gobierno Regional”.

Las declaraciones se dieron en el marco de la aprobación de millonarios fondos en el Pleno del Consejo Regional, algunos de ellos enfocados precisamente en problemáticas por el déficit hídrico en otras comunas de la región.