Nuevamente se instala en el debate público la situación de las quebradas de Valparaíso, debido a la necesidad de su cuidado y limpieza frente a la posibilidad de incendios.

Esto, luego del siniestro del último sábado, que se inició en el sector de Lo Venegas con La Bala, en el cerro Jiménez. Bomberos y CONAF dispusieron de carros, helicópteros y aviones para su control, que presentó dificultad para el tránsito de los vehículos de emergencia por el poco espacio disponible.

Fue vital el uso de equipos aéreos para atender el incendio y evitar daños a personas y casas, ya que incluso las cuadrillas de bomberos y CONAF debieron lanzar agua desde las partes altas de la quebrada para evitar que se extendiera el siniestro.

Patricio Hernández, vecino y dirigentes del sector, señala que fue escencial la ayuda de las personas para poder atender esta emergencia, pero acusa que las causas no se han podido resolver.

Sebastián Arancibia, también vecino del sector, considera que debe haber una mayor conciencia del manejo de la basura, la limpieza y el reciclaje, ya que permitirían reducir las cantidades de residuos existentes.

La emergencia del Primero de enero, dejó como saldo un total de 0,2 hectáreas quemadas, compuestas por matorrales, pasto y basura, que fueron consumidos por el fuego.