La investigación administrativa por el presunto delito de acoso laboral y abuso sexual al interior de la Policía de Investigaciones (PDI) de Valparaíso sigue en curso.

Así lo confirmó a Radio Valentín Letelier la máxima autoridad de la institución a nivel regional, Sergio Muñoz.

El prefecto inspector además señaló que tanto la denunciante, una funcionaria de 36 años de la Brigada de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI de Valparaíso, como el denunciado y jefe directo de la mujer, el subprefecto Claudio González, se mantienen cumpliendo funciones en completa normalidad.

El caso se remonta a 2018, cuando la funcionaria de la PDI presentó una denuncia en contra de su jefe en los Tribunales Laborales de Valparaíso. La funcionaria PDI acusa una “seguidilla de humillaciones, acoso laboral y sexual, agresiones verbales y hostigamientos reiterados en el tiempo” de parte del subprefecto Claudio González, las cuales incluyen besos y abrazos forzados, además de comentarios inadecuados sobre la vestimenta de la mujer.

Destaca en los antecedentes de la denuncia, por ejemplo, una anotación negativa que registró el subprefecto en la hoja de vida de la denunciante “por ser mujer y tener el culo grande”, según le habría dicho Claudio González al consultar por el motivo de la observación.

Luego que la funcionaria informara de la situación al jefe de la Prefectura de Valparaíso, Jorge Acevedo, la institución la trasladó a cumplir funciones a Viña del Mar, para de este modo evitar el contacto con quien presuntamente la habría acosado y abusado sexualmente. Posteriormente, la PDI de Valparaíso ordenó la realización de un sumario con el fin de esclarecer la denuncia de la funcionaria por acoso laboral y abuso sexual de parte de su jefe directo en la Bridec.

De todos modos el caso está siendo analizado por tribunales laborales. La audiencia de juicio quedó fijada para el 18 de febrero en el Juzgado de Letras del Trabajo de Valparaíso, con el fin de tratar la denuncia por acoso laboral.

Cabe destacar que nuestra legislación, específicamente el Código del Trabajo, solo sanciona el acoso laboral con indemnizaciones, despidos o autodespidos, debido a su ámbito. Esto, a diferencia de lo que ocurre con el abuso sexual, que sí está tipificado como delito en el Código Penal y con sanciones más allá de lo meramente económico.