Viña: académico de la Universidad de Valparaíso, Lautaro Ojeda, estudia zona siniestrada
Lautaro Ojeda, académico de la Escuela de Arquitectura, se encuentra realizando un levantamiento aerofotogramétrico de la zona incendiada de Viña del Mar, específicamente en la toma Felipe Camiroaga, a través de un convenio con el Ministerio de Vivienda y Urbanismo y la Municipalidad de Viña del Mar.
El arquitecto y director del Centro de Investigación de Vulnerabilidades e Informalidades Territoriales, Cinvit UV, estará durante dos jornadas dirigiendo vuelos del dron del Cinvit, para luego procesarlos y postproducirlos con el objetivo de “tener insumos cartográficos y topográficos para el futuro proceso de reconstrucción, incluso para el Plan Maestro de Región Urbana que se va a generar en toda la toma Felipe Camiroaga y sus alrededores”, explica.
El área de cobertura de sus vuelos de dron considera la toma Felipe Camiroaga, uno de los vértices del aeródromo de Rodelillo hasta la Quinta Vergara, la toma Farkas y la parcela 11.
Según cuenta el académico, el levantamiento aerofotogramétrico “consiste en un vuelo de dron en forma de serpiente, que toma unas cuatrocientas fotografías por cada plan de vuelo, las cuales se ingresan en un software que hace una ortorectificación respecto de la geodésica, que es la curvatura de la tierra”.
“Cada fotografía tomada del aire siempre va a tener una curvatura que se rectifica con este software según los puntos georreferencia de cada pixel de cada fotografía. A partir de ello, se genera un modelo digital de terreno y una nube de puntos que nos permite generar una cartografía de curvas de nivel”, añade.
En esta tarea es apoyado por personal del Serviu y el programa de Asentamientos Precarios del Minvu, quienes, según explica, “están marcando cruces en todo el territorio con información georreferenciada que se vincula a este procesamiento de fotografía”.
Proceso de reconstrucción
El académico enfatiza que “el objetivo es apoyar a los organismos públicos en los procesos de diagnóstico, entregando esta información técnica base que va a ser fundamental para el futuro proceso de reconstrucción. De esa forma pueden identificar las construcciones preexistentes no dañadas y cuadrarlas con el catastro del Minvu. Como es un material georreferenciado, van a poder cruzarlo con las encuestas sociales de emergencia que están desarrollando, ya que es un insumo técnico que sirve para desarrollar proyectos de ingeniería, de arquitectura y paisajísticos”.
Cabe destacar que Ojeda realizó un trabajo similar en el incendio de Puertas Negras, Playa Ancha, Valparaíso, en 2017, que posteriormente dio vida al premiado proyecto Centro Infantil Comunitario Abierto (CICA).
Sobre el incendio de Viña del Mar, el académico señala que “el proceso de reconstrucción debería iniciarse en unos seis meses, lo cual se presenta como una gran oportunidad de aplicar el nuevo programa del Gobierno “Construyendo barrios”, enfocado a los campamentos, que genera zonas de integración urbana y social prioritarias. La toma Felipe Camiroaga es una de ellas”.
En cuanto a la actuación del Cinvit, el arquitecto asegura que “siempre vamos a aportar entregando información basal de carácter técnico y científico que le sirve a todos los profesionales que trabajan en el área, siempre pensando en organismos públicos, pero nunca usufructuando para privados, ni usando la información de forma arbitraria y/o discrecional sin el consentimiento de quienes nos posibilitan hacer esto”.
“No podríamos hacer el vuelo sin el apoyo del Minvu, del Ministerio del Interior y de la Municipalidad de Viña del Mar, porque estamos en una zona de catástrofe a pocos días del incendio y se requiere de coordinaciones para regular los vuelos. Esta es una iniciativa multiactoral y a futuro estamos disponibles para lo que el ministerio y municipalidad necesiten en términos de planificación, de ser contraparte o apoyar en los procesos que ellos requieren”, indica.