Este lunes, por medio de un comunicado firmado por sus jugadoras, el plantel femenino de Santiago Wanderers dio a conocer el inicio de un paro indefinido. La medida, que da cuenta de la crisis institucional por la que pasa el club, se motiva para exigir «respuestas reales y concretas a nuestras demandas».

En el comunicado, se argumenta que en octubre del año 2021, se presentó un petitorio, buscando mejorar sus condiciones de trabajo en cuanto a lugar de entrenamiento, cantidad de sesiones semanales, indumentaria deportiva, locomoción, entre otros aspectos.

Las decanas indican que la dirigencia se comprometió a entregar soluciones, pero exigieron que debían ser locales en Mantagua y no en el Estadio Elías Figueroa y que se limitaba la cantidad de jugadoras a 28. El argumento fue la falta de presupuesto.

En el comunicado además se denuncia que luego de cinco meses, las demandas por mejores condiciones, en su mayoría, no han sido satisfechas.

«Nos invade una desmotivación inmensa y ganas de botar lo poco y nada que hemos conseguido con esfuerzo y demostrando que lo merecemos, aunque no deberíamos. Nos mantiene en este desafío el grupo que hemos formado, y el amor que tenemos por el fútbol, pero el esfuerzo y dedicación que ponemos cada uno de los entrenamientos y partidos no está siendo retribuido de manera justa», señalaron. 

Dio más detalles la capitana del plantel y jugadora por 13 años en el club, Yamila Pérez.

Las jugadoras además agregan que les está haciendo falta apoyo económico para poder asistir a los entrenamientos, indumentaria, canchas en buen estado, camarines y duchas con agua caliente, profesionales de nutrición y psicología, seguro médico, implementos deportivos y kinésicos entre otras cosas.

Para finalizar, el plantel femenino agradece a la comunidad wanderina «gracias porteñas y porteños  por su apoyo incondicional y a todos y todas quienes nos leyeron».

El club, por medio de un comunicado, señaló que sería una “falta a la verdad” ya que han realizado gestiones para “igualar condiciones de los varones”, aunque es sabido que la rama femenina sigue utilizando la misma indumentaria del año pasado, como lo señalara la investigadora de ASIFUCH, Carolina Cabello.