Un llamativo lienzo con el mensaje “Nunca más Mil Tambores: No más borrachos, orina, excrementos y agresiones” se puede haber en la subida Cumming, en Valparaíso.

El pendón fue colgado por representantes de la Junta de Vecinos número 74 del Cerro Miraflores, que agrupa a los sectores de la Plaza El Descanso, Cumming, calle Atahualpa y cerro Cárcel, como manifestación pública para evidenciar la molestia de los vecinos del sector producto de las fiestas nocturnas que allí se realizaron durante el pasado fin de semana, en el marco del Carnaval de los Mil Tambores.

Si bien las autoridades locales realizaron un positivo balance de la actividad, debido al incremento de personal de seguridad y de aseo para enfrentar la masiva convocatoria, María José Borroni, representante de la Junta de Vecinos 74, criticó el manejo de los organizadores.

Una de las medidas adoptadas para el evento de esto año fue cerrar las playas, medida que si bien no se respetó completamente, pues algunos jóvenes pernoctaron ahí, sí trasladó a muchos de los visitantes a la ciudad. Para Borroni esto fue un aporte en cuanto a la limpieza del fondo marino.

La representante vecinal cuestionó el aporte en dinero que dio el Consejo de la Cultura y las Artes a los organizadores de la actividad.

Y ante el debate que se ha generado entre los porteños respecto de si continuar realizando esta actividad, Borroni se refirió a  la propuesta que existe de hacer una consulta a los habitantes para aclarar la voluntad ciudadana sobre esta materia.

Para este 16 de octubre la Junta de Vecinos 74 está convocando a una asamblea extraordinaria para conversar estos temas y abordar propuestas como modificar el lugar del carnaval ,o utilizar recintos cerrados como el Parque Alejo Barrios en Playa Ancha.