Un total de seis familias quedaron absolutamente sin nada luego del incendio del día domingo en las tomas de Forestal Alto. Entre los damnificados hay niños y embarazadas.

Las personas más afectadas pertenecen al comité Felipe Camiroaga y Halcones de Chicureo, cuya presidenta Delia Lazo relató el drama que viven las familias.

La tesorera del comité Felipe Camiroaga, Angélica Castillo, agregó que quienes más ayudaron fueron las propias familias y que las autoridades solo aparecieron dadas sus llamativas protestas por una solución durante el verano.

En tanto, la vocera del campamento, Jessica Ortega, quién es además presidenta del comité del campamento Nueva Esperanza Forestal Alto, denunció que ya habían advertido a principios de marzo a las autoridades sobre los peligros de incendio en el sector.

Agregó que el municipio no se hizo presente, como señaló la alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato (quien se encontraba en Miami el domingo), sino que quienes ayudaron fueron bomberos, Conaf y los propios vecinos afectados.

La queja principal de los pobladores es la falta de agilidad para soluciones habitacionales, sindicando la ficha social y los trámites burocráticos como las trabas fundamentales.